martes, 10 de noviembre de 2020


Del libro 
Jardín de catástrofes 
(cuentos brevísimos sueltos 1980-2012)

© REYNALDO DISLA


Advertencia del Pinto. Gráfica de Rey Disla. 

Advertencia del Pinto


No joda, men, eso fue asperísimo. Mano, taba yo de ecursión en la Saona cuando me topé con cuatro gringos haciendo el jodío té de hongo que crece en la plasta de mierda de la vaca. ¡Y me han dao a bebé esa vaina, mira, y me he dao esa aluciná, que taba seguro que era un mono! Y según me dijeron, me gavié a una mata que ni supe, cuando se me pasó el efecto, qué hacía yo encaramao en el cojollito de un naranjo altísimo. Y eso no fue na, yo salté de un palo pa otro con una agilidá (eso ta grabao en super-8) que ni Chita ni Tarzán. ¡Me volví un mono, pay! Así que no sé tú, pero yo, que no he leído eso que dices de Darwin, lo único que sé es, que por lo meno yo, llevo un primate en la sangre. Te lo digo pa que no te asuste cuando te pase la película y me veas colgao de una rama por lo pie y chillando como Buche, el chimpancé del zoológico viejo, así yo, sin palabra, tú. 



No hay comentarios: